Confiabilidad en las fuentes de información
Toda investigación requiere de técnicas e instrumentos que enriquezcan y brinden credibilidad a la información obtenida en el proceso de indagación. Elías Mejía director de la Unidad de Post Grado de la Facultad de Educación de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos dice que en el caso de la educación, “es importante seleccionar instrumentos seguros de medición con el propósito de cuantificar los comportamientos y atributos que habrán de estudiarse” (Mejía, 2005, pág. 55), y señala algunas técnicas, como entrevistas, cuestionarios, pruebas, intervalos; idóneas para un manejo estricto de los conceptos, saberes y apropiaciones conceptuales.
En este proceso, se utilizan ideas de autores que han tenido trayectoria y que sus ideas hayan sido soporte para otros autores. Es importante tomar este tipo de precauciones porque además de darle fundamento conceptual a la investigación, hace que el trabajo tenga una buena sustentación dándole al lector una información confiable.
Por otra parte, se debe tener en cuenta que, si bien las técnicas de investigación son de ayuda para fortalecer las indagaciones, se debe tener especial cuidado con el derecho que el autor tiene sobre ellas. Para ello hay maneras de utilizar adecuadamente los recursos: se pueden parafrasear o citar pero referenciándolas (tomar el nombre del autor, tipo de fuente, nombre de la fuente, año…). Con esto se obtiene una buena utilización de la documentación y el empleo de ideas de personas que conocen más del tema y que lo han sometido a un estudio riguroso. Por esta razón, los investigadores deben catalogar la información, siendo objetivos en su búsqueda, encontrando documentos concretos que le sean de utilidad al momento de hacer su trabajo investigativo.
Así mismo, Torre y Navarro argumentan que
“La adquisición u obtención del conocimiento, la fijación, organización y ampliación del mismo así como su transmisión, requieren de normas especiales, de una metodología que precise y eduque en pensamiento y la expresión, que los estimulen y fortalezcan. Así pues, el método es un proceso lógico, surgido del raciocinio y de la inducción” (Torre y Navarro, 1982)
En suma, al estar apoyados en técnicas de investigación, nos abrimos más al conocimiento y facilitamos a los lectores un buen reconocimiento de las ideas planteadas. Además nos involucramos más en nuestro proceso como investigadores, aplicando la ética profesional dándole la importancia que merece las ideas de otros autores y respetando los lectores que buscan que se les brinde un conocimiento veraz y transparente.
En este proceso, se utilizan ideas de autores que han tenido trayectoria y que sus ideas hayan sido soporte para otros autores. Es importante tomar este tipo de precauciones porque además de darle fundamento conceptual a la investigación, hace que el trabajo tenga una buena sustentación dándole al lector una información confiable.
Por otra parte, se debe tener en cuenta que, si bien las técnicas de investigación son de ayuda para fortalecer las indagaciones, se debe tener especial cuidado con el derecho que el autor tiene sobre ellas. Para ello hay maneras de utilizar adecuadamente los recursos: se pueden parafrasear o citar pero referenciándolas (tomar el nombre del autor, tipo de fuente, nombre de la fuente, año…). Con esto se obtiene una buena utilización de la documentación y el empleo de ideas de personas que conocen más del tema y que lo han sometido a un estudio riguroso. Por esta razón, los investigadores deben catalogar la información, siendo objetivos en su búsqueda, encontrando documentos concretos que le sean de utilidad al momento de hacer su trabajo investigativo.
Así mismo, Torre y Navarro argumentan que
“La adquisición u obtención del conocimiento, la fijación, organización y ampliación del mismo así como su transmisión, requieren de normas especiales, de una metodología que precise y eduque en pensamiento y la expresión, que los estimulen y fortalezcan. Así pues, el método es un proceso lógico, surgido del raciocinio y de la inducción” (Torre y Navarro, 1982)
En suma, al estar apoyados en técnicas de investigación, nos abrimos más al conocimiento y facilitamos a los lectores un buen reconocimiento de las ideas planteadas. Además nos involucramos más en nuestro proceso como investigadores, aplicando la ética profesional dándole la importancia que merece las ideas de otros autores y respetando los lectores que buscan que se les brinde un conocimiento veraz y transparente.
Referencias:
Mejía, E. (2005). Técnicas e instrumentos de investigación: Instrumentos de medición. (1ra edición). Lima: Biblioteca nacional de Perú. Tomado de http://ebookbrowse.com/mejia-tecnicas-e-instrumentos-pdf-d172337310
Torre, E. y Navarro, R. (1982). Metodología de la investigación bibliográfica, archivista y documental. Texas: Universidad de Texas. Tomado de http://biblioteca.universia.net/html_bura/ficha/params/id/37846210.html
Cibergrafía:
Raquel, (2010) estrategias de aprendizaje [imagen} recuperado de http://raquel-bloguned.blogspot.com/
Mejía, E. (2005). Técnicas e instrumentos de investigación: Instrumentos de medición. (1ra edición). Lima: Biblioteca nacional de Perú. Tomado de http://ebookbrowse.com/mejia-tecnicas-e-instrumentos-pdf-d172337310
Torre, E. y Navarro, R. (1982). Metodología de la investigación bibliográfica, archivista y documental. Texas: Universidad de Texas. Tomado de http://biblioteca.universia.net/html_bura/ficha/params/id/37846210.html
Cibergrafía:
Raquel, (2010) estrategias de aprendizaje [imagen} recuperado de http://raquel-bloguned.blogspot.com/